10 razones para irse de Erasmus
Para empezar, ¿De verdad necesitas un motivo para irte de Erasmus? Puedes preguntar a cientos de estudiantes Erasmus que ya han disfrutado de la beca y todos te van a decir lo mismo, no lo pienses más y vete de Erasmus! Si todos están de acuerdo ¿Por qué no probar?
Si ya has conseguido la beca Erasmus puedes obtener más información sobre las ayudas económicas de la beca Erasmus o todos los documentos que hay que completar para que hagan las convalidaciones en los enlaces y si todavía no la has solicitados y quieres tener una guía paso a paso para pedir la beca Erasmus aquí tienes toda la información.
Si lo único que sabes del Erasmus es que es una oportunidad para pegarse un año de fiesta y no sabes al cien por cien por cien las ventajas que ofrece esta beca, hemos encontrado 10 razones de peso para que no lo dudes más y solicites tu beca Erasmus. ¿Eres tímido y no sabes si vas a encajar con la gente? ¿Se te dan muy mal los idiomas y te da vergüenza hablar? No te preocupes. De verdad, vas a encontrar gente como tú, con tu misma personalidad y con un buen sentido del humor que te van a ayudar a disfrutar de la experiencia.
1. Aprender a valerte por tí mismo
Los estudiantes que han tenido que salir de casa para irse a estudiar a otra ciudad ya tienen algo de rodaje, pero la verdad es que la mayoría de los estudiantes completa los estudios universitarios estando en casa de sus padres. Por lo que realmente nunca has experimentado grandes cambios en tu vida. Al empezar el Erasmus te vas a una ciudad que no conoces, con un idioma que no dominas y tienes que encontrar casa, hacer los papeleos de la universidad sacarte el abono transporte, dar de alta un móvil o la luz, empezar a cocinar y hacer las tareas del hogar… todo esto en el espacio de 3 días o una semana. Tus padres no van a estar ahí para apoyarte. Tus amigos no van a estar ahí para compartir dudas. Estás solo. Y la única gente con la que puedes compartir la experiencia son “de momento” completos desconocidos.
Gracias a este proceso de básicamente tirarte a una piscina sin saber nadar vas a aprender muchísimas cosas, no solo de la vida en sí y de las relaciones sociales, también vas a conocerte a ti mismo. Aprender de qué eres capaz y hacer cosas que pensabas que nunca harías. La experiencia Erasmus sirve para tener más confianza en uno mismo, tanto en situaciones cotidianas como en el entorno laboral.
2. Amigos para toda la vida
Vas a empezar la experiencia Erasmus solo, pero una cosa es segura, la vas a acabar con decenas de nuevos amigos. Cuando te enfrentas a la burocracia en otro país vas a tener muchas dudas, y vas a conseguir sobrepasar todas esas dudas gracias a trabajar en equipo con desconocidos, el chico de Almeria que te dice qué papel tienes que conseguir en recepción, la chica gallega que te pasa el número del casero. Se crean unas circunstancias especiales donde todos estáis empezando la misma experiencia a la vez, y todos tenéis que afrontar los mismos problemas, esto crea una unión, donde todas las personas crecen de forma individual y en conjunto creando fuertes relaciones de amistad.
Cuando menos te lo esperes vas a estar saliendo de fiesta todos los días con tus nuevos mejores amigos que conoces de hace solo unas semanas, pero que tenéis tantas cosas en común que parece que os conocéis de toda la vida.
Dentro de lo que cabe, todos los amigos que has conocido en la universidad más o menos tienen una homogeneidad. Casi todos vivís en la misma ciudad y posiblemente la renta de las familias sea muy parecida. Gracias al Erasmus te vas a juntar con gente de todas partes de España, gente que sus padres trabajan en el campo o en una gran oficina. Gente con historias que nunca habías escuchado y que son completamente diferentes a tu entorno. Y estos es solo con los Españoles. Básicamente el Erasmus es la mili del siglo XXI. Pero además de conocer la gran riqueza cultural que tenemos en España, también vas a tener la oportunidad de conocer gente de otros países y vas a escuchar historias alucinantes, y probar platos de comida que ni siquiera vas a saber pronunciar. Vas a descubrir que dentro de todas nuestras grandes diferencias, al fin y al cabo todos somos iguales y todos buscamos divertirnos de la mejor manera posible con nuestros amigos, sean de donde sean.
¿Te da un poco de apuro empezar la experiencia de esta forma? No te preocupes, la oficina de relaciones internacionales de la universidad organizan reuniones y facilitan los contactos de todas las personas de tu universidad que van a realizar un Erasmus en tu misma ciudad de destino. De esta forma puedes tener un apoyo desde el primer día.
3. Aprender otro idioma
Para algunas plazas de Erasmus tienes que conseguir un B1 o un C1, y en teoría todos tendríamos que conocer el idioma. Nos vas a tardar mucho en darte cuenta que estás muy verde, por mucho listen and repeat que hayas realizado en clase no vas a tener ni idea de que te está diciendo la dependienta del supermercado.
Estamos acostumbrados a aprender un idioma con acentos neutros, y sobretodo aprender mucha teoría y muchas reglas gramaticales que no son lo mejor para ayudar a mantener una conversación. Por lo que esta experiencia te va a venir de lujo para aprender otro idioma de la mejor manera posible, haciendo una inmersión total. Vas a salir de fiesta con gente de otros países donde no vas a tener más remedio que hablar en inglés, francés o italiano, aunque al principio te de vergüenza, poco a poco vas a ver que todos estás en las mismas y después de un par de cervezas estás más cerca de convertirte en bilingüe.
Pasar un año o seis meses en otro país donde tienes que atender las clases en otro idioma y relacionarte en otro idioma ayuda muchísimo. Aprender nuevas palabras, aprendes usos coloquiales, a pronunciar correctamente… y lo mejor de todo es que la mayoría de las veces estás aprendiendo ese idioma con tus amigos, mientras estás de fiesta y sin apenas darte cuenta del gran aprendizaje que has realizado.
4. Aprender una cultura diferente
Desde España se escuchan muchas noticias de lo que pasan en otros países, incluso puede que hayas estudiado la historia de tu país de origen o que conozcas algo de su gastronomía. Pero en la cultura pasa como con el idioma, no ves la verdadera realidad hasta que bajas del avión. Vivir en otro país ayuda a conocer otras realidades sociales. Aprendes que en otros países hay cosas que son mucho mejores y te sorprende cómo es posible que otras cosas vayan tan mal. Vas a poner en perspectiva muchas cosas de tu día a día. Aprender a valorar pequeñas acciones que pasaban desapercibidas. Aunque muchas veces digamos que nuestro país no es el mejor, desde fuera vamos a ver una cara diferente, y le vamos a echar de menos.
A parte de aprender lo que es estar bajo las reglas de otro Estado, tan bien vas a vivir la experiencia de vivir bajo otro ambiente cultural. Pasear por calles con diferentes estilos arquitectónicos, estructuras, museos, mercados, bares y bares con terrazas. Si tienes la suerte de hacer el Erasmus en Italia lo vas a flipar con todos los monumentos que te puedes encontrar por la calle. La forma en que la gente sale de fiesta y convive, ver cómo en Inglaterra la gente sale de fiesta a las 5 de la tarde, que en Bruselas da igual el frío que haga en Diciembre que todos salen a tomarse un vino caliente en la Grand Place, o como en Noruega dejas de ser llamada la rubia porque te dicen que allí eres morena…
Cuanto más lejos te vayas de casa más va a cambiar tu paladar. Vas a echar de menos la comida de casa de tus padres pero también vas a descubrir una colección de nuevos sabores que se van a quedar contigo de por vida. Tienes la oportunidad de compartir muchos platos con gentes de otros países, no va a faltar la fiesta en casa de algún amigo en la que todos tienen que llevar comida tradicional de su país y te vas a quedar loco con la cosas que algunas personas comen.
Gracias a esa convivencia vas a aprender a cocinar muchos platos, así cuando vuelvas a casa puedes demostrar a tus amigos que eres todo un cocinillas. Vas a seguir cocinando pasta, pero ahora puedes decir que es una receta que te enseñó tu amigo y italiano y es algo completamente diferente
Aqui puedes encontrar un listado de becas para estudiar en el extranjero. Para países como Japón, Estados Unidos, Europa...
5. Salir de fiesta
Los hemos mencionado varias veces a lo largo de este artículo, si, se sale mucho, puedes salir de fiesta tanto como quieras. Al principio se hace para conocer gente. La universidad y las organizaciones de estudiantes organizan eventos, salidas a cenar, salidas a tomar copas, fiestas en discotecas. Básicamente la primera semana de universidad tienes que algún evento social al que acudir, esto facilita que en apenas unos días conozcas a decenas de personas ¿y que haces? Pues ya que tienes nuevos amigos que menos que seguir saliendo de fiesta para conocerlos mejor.
Se dan muchas circunstancias para que los estudiantes salgan más de fiesta. Algunos es la primera vez que salen de casa de sus padres y están como locos y no paran de montar fiestas en casa. Tienes mucha flexibilidad a la hora de escoger tus clases, por lo que no siempre tienes que ir a la universidad a primera hora de la mañana, o te puedes dejar los viernes libres. También hay que tener en cuenta que estás en un proceso de descubrimiento, estás conociendo una nueva ciudad y nuevas personas y quieres acudir a todas las salidas para no perderte nada, dejar de conocer sitios o ver qué es lo que ha hecho el resto de la gente. Por lo que siempre te apuntas a lo que haga falta.
¿Se liga más estando de Erasmus? Si, es mucho más sencillo. De primeras siempre tienes más cosas en común con la otra persona, por lo que es más fácil mantener una conversación. Has ganado más confianza en tí mismo después de sobrevivir a la locura de las primeras semanas y muchos de los estudiantes están en un proceso de dejarse llevar y experimentar todo lo posible.
6. Viajar
El Erasmus es una oportunidad única para realizar muchísimos viajes. No solo haces el primer viaje a tu ciudad de destino. Una vez que estás allí las organizaciones de estudiantes van a organizar diferentes excursiones para ir a conocer otras ciudades y lugares de interés. Básicamente cómo si estás en España y se montan excursiones para ir a ver Segovia, Las Fallas y los San Fermines. Pues lo mismo pero en el país al que vayas. Además de las organizaciones de estudiantes, siempre te acabas montando un par de viajes con tu nuevo grupo de amigos. Esta experiencia es genial para conocer casi todas las ciudades de tu país de destino.
Además de los viajes dentro del país, vas a tener la oportunidad de encontrar vuelos baratos a otro países. España está ubicada lejos del centro de Europa por lo que no siempre podemos encontrar los vuelos más baratos para visitar otras ciudades en nuestro continente. Pero si te vas de Erasmus a una ciudad más céntrica, como Bruselas, Amsterdam, Milán, Berlín vas a encontrar una gran variedad de vuelos low cost para visitar otras ciudades. Vas a coger un virus llamado viajar. Una vez que te sueltan en otro país y aprendes a desenvolverte por ti mismo no hay quién te parece y quieres otro y otro más.
Lo bueno es que todos los estudiantes tienen acceso a tarifas especiales para conseguir un descuento en los vuelos, aquí tienes un listado de todas las compañías aéreas que ofrecen descuentos para estudiantes. Además, Ryanair ofrece un descuento para estudiantes en los ocho primeros vuelos que hagas mientras estás de Erasmus, una iniciativa que no puedes dejar escapar.
Los viajes no paran cuando termina el Erasmus. Te acabas de hacer colega un italiano, de un escocés y un polaco. No hay mejor excusa para viajar que ir a visitar a tu colega del Erasmus que te puede dejar dormir de gratis en el sofá de su casa. A esto hay que añadir las quedadas Erasmus que hagas con tus colegas españoles ¿Te acuerdas de lo que dijimos antes sobre ir a Las Fallas y demás? No veas como triunfa que te den casa en Valencia tus amigos del Erasmus, o el colega que vive en la playa… en definitiva, que el virus del viaje va a rematar tu cartera.
7. Completar tu expediente académico
Las universidades no tienen las mismas asignaturas, por lo que una parte importante del programa Erasmus es poder convalidar asignaturas cursadas en el extranjero por las asignaturas de tu carrera. Muchos estudiantes Erasmus aprovechan esta oportunidad para quitarse de encima esas asignaturas que se han atragantado y ya se encuentran en 3 o 4 convocatoria.
Aparte de esta increíble ventaja, cada país tienen diferentes sistemas dentro de las universidades, por lo que puedes completar o aprobar una asignatura en una carrera de diferentes formas. Por ejemplo en Reino Unido se hacen muchos trabajos y trabajos en equipo, en Italia los exámenes son orales y tienes que defender un tema delante de uno o dos profesores. Esto ayuda mucho a conseguir mayor versatilidad y mejorar tus formas de aprender.
8. Mejorar tu currículum
El mejor motivo para decir a tus padres es, me voy de Erasmus porque puede ayudarme a tener más salidas laborales y tener un trabajo. Efectivamente el Erasmus está muy bien visto por las empresas. El factor idioma es muy importante, no solo vale con demostrar que tienes un gran conocimiento académico de ese idioma, sino que también has vivido y te has desenvuelto utilizando ese idioma en otro país. A día de hoy las grandes compañías buscan perfiles internacionales, que sepan utilizar otro idioma y no tengan problemas a la hora de relacionarse con gente de otros países. Además de las relaciones laborales, hacer un Erasmus también demuestra que eres una persona capaz de sacarte las castañas del fuego y coger el toro por los cuernos, tienes iniciativa y no tienes miedo de afrontar situaciones nuevas.
Estás ventajas no solo se aplican a las empresas en España, gracias a que ahora conoces otro idioma y otra cultura tus posibilidades laborales se multiplican ¿Por qué no buscar trabajo en tu país de destino? Algunas universidades tienen muy buenos programas de integración laboral para sus estudiantes y como estudiante Erasmus también puedes utilizar estos incentivos para buscar prácticas en empresa o un contrato de trabajo al terminar tu carrera.
Acuérdate de incluir todas las habilidades en tu currículum. Puedes mencionar dónde has estado ed Erasmus, cómo has aprendido y utilizado el idioma y que habilidades personales has obtenido gracias a tu estancia en el extranjero como la madurez alcanzada, o la disciplina aprendida.
9. Ciudadano Europeo
El programa Erasmus es una iniciativa de la Unión Europea para que los estudiantes puedan completar los estudios en otro país, creando relaciones con estudiantes de otros estados miembros y añadir otro punto de vista al desarrollo académico. De hecho la Unión Europea ha lanzado una iniciativa para que los estudiantes pueden realizar algo más que un Erasmus, sacarte una carrera independientemente de a qué universidad vayas, prácticamente podrías empezar la carrera en Madrid, hacer un par de cursos en París y terminar en Roma, ya que están buscando que las instituciones académicas empiezan a compartir conocimiento, procesos de laboratorio y resultados de investigación.
Al disfrutar de una beca Erasmus tú eres un poco partícipe de esos resultados. Esta beca puede abrirte la mente y mostrar que los límites están más allá de lo que nosotros conocemos. La beca Erasmus te ayuda a tener una mentalidad más internacional, más solidaria y más amable con el planeta en el que vivimos.
10. La mejor experiencia de tu vida
Irse a estudiar a otro país o a vivir a otro país es una experiencia dura. El Erasmus te ofrece la oportunidad de haber vivido en otro país, aprender otro idioma, conocer gentes de otras ciudades y otros países e integrarte en una sociedad completamente distinta cuando apenas tienes 20 años. Es una experiencia de la que se puede aprender muchísimo, no solo de cómo funciona el mundo, y sobre quiénes son tus amigos, pero también puedes aprender muchísimo de quién eres tú como persona.
Este aprendizaje puede ser duro, pero es muy gratificante. Vas a encontrarte a cientos de estudiantes de Erasmus que se han ido y la beca no les ha cambiado para nada, o ellos dicen que no les ha cambiado. Simplemente han hecho lo mismo que solían hacer en España pero en otro país. Sin embargo si te vas con una mentalidad abierta, personalmente puedes llegar a crecer muchísimo y al fin y al cabo eso es lo más importante. No solo es un año en el que vas a aprender otro idioma, vas a salir de casa de tus padres y vas a pasarte muchas noches de fiesta, sino que es algo que te puede cambiar como persona y de la forma en que ves el mundo. Hay pocas cosas ahí fuera que puedan generar este tipo de cambios.
Después de todos estos motivos para irte de Erasmus ¿Te queda alguna duda? ¿Hay alguna razón por la que no disfrutarás de esta experiencia? Algunos estudiantes no tienen ningún interés en salir al extranjero y no hay ningún problema. Pero si tienes algo dentro de tí, que tiene cierto interés, un gusanillo por lanzarse a la aventura, de verdad no lo pienses más y aprovecha la oportunidad. No conozco a ningún estudiante que se haya arrepentido de su Erasmus, sin embargo si conozco a muchos compañeros de facultad que me han dicho, joder cómo me hubiera gustado poder vivir esa experiencia.
¿Estás listo para salir a estudiar a otro país? Hemos preparado un listado con todas las cosas que tienes que tener en cuenta antes de salir a estudiar al extranjero.
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@Fotografía de cabecera de Pixabay